“A inicios de 1812 apareció en la región del partido de Paria un nuevo caudillo indígena, Blas Ari, quien se convirtió en un dolor de cabeza para las autoridades locales. A lo largo de varios meses, Ari y un grupo de insurgentes recorrió gran parte del partido de Paria atacando a los viajeros, obligando a las autoridades a entregar el dinero del tributo y, en otras oportunidades, recibiendo donativos de los pueblos con el objetivo de apoyar a los insurgentes.
“A través del expediente de captura de algunos cómplices de Blas Ari, entre los que se hallaba su propia esposa, se puede saber de su accionar. Los rebeldes fueron apresados en el camino de Pampa Aullagas, donde aparentemente el grupo asaltó a algunos viajeros. Les quitaron varios bienes, entre los que se hallaban fuentes de plata, palanganas, confiteras, otra vajilla de plata, además de un breviario, un libro, alguna ropa, joyas y otras cosas más, que fueron ocultadas por la esposa de Ari, María Rufina y Tomasa viuda de Ocsa. Entre estos objetos se hallaban un poncho azul de algodón y una carabina que pertenecía al cura de Salinas de Garci Mendoza, algunos objetos de altar de cura de Condo y ‘ochenta pesos de la plata que dice ser de aguardiente que fueron de los costeños y se vendió en Pampa Ullagas’.
“Por el informe sobre su captura se ve que no se trataba únicamente de un grupo dedicado al asalto de caminos, sino de un conjunto de personas que llevaban a cabo acciones ilegales con el objetivo de apoyar a los insurgentes”
María Luisa Soux
Este texto forma parte de la bibliografía consultada para la obra Republiquetas.
Fuente: María Luisa Soux, El complejo proceso hacia la independencia de Charcas (1808-1826). Guerra, ciudadanía, conflictos locales y participación indígena en Oruro, Lima, IFEA, 2010, pp. 258-259.